La importancia del ser

A partir de este taller reflexionaremos acerca de los cuatro pilares de la educación.

El dominio de los instrumentos del saber tales como la atención, la memoria, la concentración, el pensamiento y el razonamiento son técnicas que como dice el pilar “aprender a conocer” nos ayuda a la comprensión y a la aplicación del conocimiento.

Es tan interesante y tan amplio que abarca tanto las competencias personales como el aprendizaje del interés propio o autoconstrucción.

Se deja a un lado las diferencias personales y el individualismo fomentando el trabajo en equipo como unión, sin desvalorar la autoestima, el desarrollo de la identidad y la educación en valores; todo esto lo contemplan los cuatro pilares de la educación.

No debemos olvidar la acción a llevar a cabo por la familia, la cual ha de llegarle un mensaje al niño, donde aparezcan todos estos valores que describen los pilares así como la figura del profesor, el cual tendrá un papel protagonista en la educación de ese niño o niña.

"Todo el mundo piensa en dejar un planeta mejor para nuestros hijos... Cuando lo que debería pensar es en dejar mejores hijos para el Planeta."

Desde nuestro punto de vista consideramos la importancia de todos los pilares por igual ya que uno no podría darse sin la ayuda de los otros siendo así complementarios. Sin embargo, el pilar que destacamos es el pilar de aprender a ser. La escuela no nos educa para ser, nos educa para hacer bien las cosas, aprender a hacer una mayor cantidad de actividades que nos sirvan para nuestra vida profesional, es decir, nos educa frente a la futura profesión del alumno o alumna, ahora bien, ¿cuándo nos enseñan a ser personas? ¿Cuándo aprendemos a "ser"? los educadores no nos guían en un camino personal, en el camino de la vida, no se tienen en cuenta las emociones individuales y colectivas, no se le presta atención a la persona en sí. La educación debería de comprender que a pesar de todo, somos personas.

Leticia Aragón García

Ainhoa Galiana García

Ana María Gil Moreno

David Vergara Fontiveros

Los cuatro pilares de la educación.

Para comenzar, consideramos fundamentales los cuatro pilares para el desarrollo de la educación íntegra de una persona. Nos recuerdan al proceso que tiene un niño en la escuela, que al principio conoce, tanto su entorno, como los profesores, su compañeros y todo lo que le rodea. Después empieza a hacer, es decir a aplicar los conocimientos que tiene que llevar a la práctica convive y más tarde es, porque una vez que sea, puede ser simpático amable, egoísta, etc.

1. Aprender a conocer:

Es cuando el niño tiene empieza a tener relación con el colegio, aquí es donde empieza a tener su primer acercamiento, conociendo y tratando a sus nuevos compañeros, profesores, asignaturas, empezando aqui a adquirir los primeros conocimientos.

2. Aprender a hacer:

En esta segunda fase, es donde el niño intenta poner en práctica todo que ha ido aprendiendo anteriormente

3. Aprender a vivir juntos:

En la tercera fase, el niño a parte de ir conociendo a sus compañeros, va empezando a convivir con ellos, empieza a respetarlos, y también va aceptando críticas, y aceptando las opiniones de los demás, dándose cuenta así que no solo es válido lo que el piensa.

4. Aprender a ser:

En la cuarta y última fase, y una vez que el niño a aprendido todo la anterior, este va a llegar a aprender a ser tal y como él mismo es. Se va a ir formando completamente, llegando a formar así su propia personalidad.

Ana María Domínguez Lara

María Orellana León

Laura Romero Acebes

EL APRENDIZAJE NO TIENE LÍMITES

PATRICIA RODRIGUEZ MORILLA
ROSARIO NEBRO PERUJO

Tras la lectura del capítulo “Los cuatro pilares de la educación”, la parte que más nos ha llamado la atención, y por ello, en la que nos vamos a centrar es la que argumenta que “…El proceso de adquisición de conocimiento no concluye nunca y puede nutrirse de todo tipo de experiencias. … La enseñanza básica tiene éxito si aporta el impulso y las bases que permitirán seguir aprendiendo durante toda la vida, no sólo en el empleo sino también al margen de él”

Y es que nunca se es demasiado joven para empezar a adquirir conocimientos ni demasiado mayor para seguir haciéndolo, ¿Hay una edad establecida? ¿Hay límites? ¿Hay razones para parar? Da la sensación de que nuestros mayores, sólo por ser mayores ya no tienen posibilidades de avanzar y deben conformarse con lo aprendido en su etapa escolar (que en la gran mayoría de casos fue bastante corta y pobre en conocimientos) y es injusto porque ellos también tienen inquietudes, también pueden y deben cultivar su memoria y su intelecto, también tienen posibilidades además del derecho de aprender a conocer, aprender a ser, aprender a vivir juntos y con los demás y aprender a hacer.

A su manera, son sabios, pero sabios de la vida, sabios porque sus conocimientos son los que se adquieren en la vida, fruto de sus experiencias, emociones, valores, equivocaciones y aciertos….. Han aprendido de lo real, y han tenido la necesidad de poner soluciones inmediatas a problemas reales. Poseen un conocimiento que no se enseña con libros, y que está lleno de valores humanos, principios y creencias.

No tuvieron la oportunidad de tener acceso a la formación académica que se merecían y que todos hemos tenido, y si ahora hay posibilidades ¿Por qué es demasiado tarde?

Os mostramos unas fotos en las que se puede ver que no hay límites ni fronteras.

APRENDER A SER

Tras una breve reflexión hemos llegado a la conclusión de que los cuatros pilares que se nombran en el artículo son importantes en la educación, pero desde nuestro punto de vista, el pilar de aprender a ser es el principal porque debemos aprender a hacer nuestro propio conocimiento y tener un interés propio. Por otro lado, a través de este pilar, podemos llegar a desarrollarnos como ser persona, esencia además de la creatividad, tener autonomía y autoestima.

Por otra parte, los profesionales de la educación están continuamente enfrentándose a una serie de retos que la sociedad le impone, algunos de ellos que están relacionados con el pilar que nos hemos centrado son, la libertad de opinión, enseñar a ser crítico con la información, manipulación de los medios de comunicación, generar conocimiento de la información, poco contacto entre las personas.

Lo que más nos ha llamado la atención son los diez principios para aprender a ser, que ha establecido María, una profesora, estos son los siguientes:
1. Aprender a conocerme.
2. Aprender a controlar mis emociones.
3. Aprender que puedo hacer muchas cosas bien.
4. Aprender a comunicarme con los demás.
5. Aprender a escuchar a los demás.
6. Aprender a ser educado.
7. Aprender a decir que no.
8. Aprender a no estar de acuerdo sin enfrentarse.
9. Aprender a estar alegre.
10. Aprender a sentar, pensar a vivir

Para terminar tenemos una reflexión, esta es que no todo el mundo es capaz de opinar libremente o no deja que otros lo hagan. Según los 10 principios que nos da esta profesora muchos de ellos la gente no es capaz de desarrollarlos, por lo tanto, hacemos una pregunta, ¿todos hemos aprendido a ser?

Carmen Isern Fargas
Rocío Dolores Rodriguez de Dios
Lisanne Jose Van Dijk
Rocío Bárbara Vico Ruiz

Ser Hoy

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Autoconocimiento Cooperación Sentido crítico

Enriquecimiento Independencia Misma dirección Respeto

Flexibilidad Competencias Perspectivas

Libertad Autonomía Equilibrio Curiosidad Entusiasmo.

Son conceptos que destacamos de la lectura “Los Cuatro Pilares de la Educación” y que a continuación reestructuramos, para ofrecer una visión general de lo que entendemos imprescindible cuando hablamos de educación en el siglo XIX.

1. Autoconocimiento para conocer a los demás.

2. Comunicación para colaborar.

3. Cooperación para mejorar.

4. Aprender a aprender, ejercitando el pensamiento.

5. Flexibilidad, curiosidad y perspectiva para ampliar horizontes.

6. Competencia basada en la actitud.

7. Independencia y autonomía para ser uno mismo.

8. Libertad de pensamiento y expresión como base de la relación humana.

9. Equilibrio, objetivo común y respeto para caminar juntos.

10. Enriquecimiento y sentido crítico para crecer.

Monse Castillo Jiménez

Cristina Clavijo Andrade

Patricia Navajas Jaén

Marta Racero Lara

Elena Ybarra Morell

APRENDER A VIVIR JUNTOS

De todos los pilares de la educación existentes: aprender a conocer, aprender a hacer, aprender a vivir juntos y aprender a ser, queremos destacar:

Aprender a vivir juntos

La razón por la que creemos que este pilar es esencial en nuestra vida, es por la importancia que tiene el trabajo cooperativo; tanto para lograr un éxito mayor en las tareas y objetivos que nos marcamos a lo largo de nuestras vidas, como por el enriquecimiento personal en el desarrollo del proceso, ya sea en el ámbito escolar o laboral.

Nos encontramos en una sociedad altamente competitiva, donde se valora mucho el éxito individual y, en ocasiones, se deja a un lado el trabajo mutuo, el colaborar y el ayudarse. Por estos motivos, creemos que es conveniente un cambio.

Centrándonos en el ámbito escolar, que es lo que realmente nos incumbe en este momento, pensamos que los docentes y pedagogos tenemos la tarea de desarrollar esta competencia en los estudiantes, permitiendo que trabajen de manera significativa en proyectos por equipos y hacerles ver que dichas habilidades y competencias se encuentran dentro de ellos.

Deben saber que trabajando de este modo aprenderán a aportar aquello que se le dé bien, aprovechando sus talentos, respetando y valorando por igual las opiniones de sus demás compañeros como las suyas. De manera que entiendan que con lo que aporta cada uno, se puede realizar un gran trabajo.

Esta metodología ayudará en gran parte a crear esto que llamamos “aprender a vivir juntos”, puesto que cuando existen estos grupos, los niños y niñas se conocen, se crean lazos afectivos, que les ayudarán a confiar, a quererse, a crear todo lo necesario para que exista un buen clima de afecto y cariño, que, además, influirá en su aprendizaje de manera muy positiva.

No podemos olvidar, que para que el alumnado crea en esta forma de trabajar, los docentes debemos predicar con el ejemplo. Hay que trabajar en equipo por el bien de nuestros alumnos. Los docentes hemos de colaborar, ayudarnos, ponernos de acuerdo. Es muy importante para el bienestar y la confianza de una clase y para que los educandos vean que este método es posible y da frutos.

“Yo hago lo que usted no puede, y usted hace lo que yo no puedo. Juntos podemos hacer grandes cosas” Madre Teresa de Calcuta.

ROCÍO ROJAS SANCHO

BELÉN ROMERO GONZÁLEZ

Queremos centrarnos en los pilares titulados ``Aprender a vivir juntos, aprender a vivir con los demás´´ y ``Aprender a ser´´, ya que consideramos estos unos pilares prácticamente abandonados en la educación actual, centrándose mas en los otros dos restantes.

Tanto en la sociedad como en la educación actual ya sea consciente o inconscientemente aceptamos los valores cuantitativos por encima de cualquier valor cualitativo, es decir, un efecto medible como la formación académica ha estado siempre valorada por encima de temas como la convivencia o la comunicación, por lo que uno de los retos mas importantes a los que tendrá que hacer frente la educación es a corregir esos conceptos predeterminados que se tienen sobre la valoración de las cosas, ya que muchos de los principales problemas que podemos observar en las aulas y que la sociedad esta demandando (violencia, poco compañerismo...) están basados en potenciar principios como el de aprender a vivir juntos, aprender a vivir con los demás y aprender a ser.

Pero todos los agentes de la educación parecen estar mas centrados en quitarse ``muertos´´ de encima que en buscar las soluciones adecuadas para abordar estos problemas.

No entendemos como los centros educativos no potencian una mayor actividad verbal entre los alumnos (debates, exposiciones, participación democrática...) ya que a la hora tanto de un futuro laboral y mas importante aun un futuro como ciudadano en un entorno social activo debería ser uno de los centros de enfoque de la educación. Consideramos que muchas de las problemática de la educación de hoy en día empezaría a cambiar de manera cuantitativa (ya que parece el único valor que se tiene en cuenta).

Con todo esto queremos referirnos a que las problemáticas actuales (que son menos de las que se interesa decir) tienen una necesidad de actuación tanto educativa como social, ya que es ahí donde encontramos el verdadero déficit y que los dos primeros pilares se verán directamente afectados de manera positiva, ya que el aprender a conocer y el aprender a hacer serán mas amenos desde un buen ambiente de trabajo.

Benítez Láinez, Alberto

Márquez Morito, Roberto